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«Las aventuras de Simbad el Marino», de autor anónimo

«Traducción del árabe de René R. Khawam»
«Traducción del francés de Manuel Serrat Crespo»
«Prólogo de Arturo Pérez-Reverte»
«Ilustración de la cubierta de Augusto Ferrer-Dalmau»

«Lo que verdaderamente anima el espíritu imbatible de Simbad es dirigir una contundente interpelación al mundo, los peligros y las gentes que lo pueblan. Algo que puede resumirse de modo perfecto en una sola palabra: ¿Asombradme?. Estoy seguro de que, como a mí cuando leí por primera vez este libro portentoso, Las aventuras de Simbad el Marino también asombrarán al lector». [Arturo Pérez-Reverte]

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CUBIERTA SIMBADSiete fueron los viajes de Simbad, y siete también los naufragios padecidos por el legendario marino, acaecidos bajo el reinado del califa Harún al-Rashid, perteneciente a la Dinastía Abasí. Simbad el Marino, el explorador, el aventurero de Bagdad, es el arquetipo de todas las novelas de aventuras posteriores y el Ulises de Oriente.
Para tantos y tantos lectores, el nombre de Simbad está inseparablemente unido al de Sherezade y Las mil y una noches. Pero nunca formaron parte de estas Noches las aventuras del intrépido marino, como René R. Khawam nos demuestra en esta edición. A partir de los antiguos manuscritos, Khawan nos descubre al verdadero Simbad, uno infinitamente más cercano, aunque la aventura, con su cortejo de monstruos y magos, de mundo real e imaginario, sigue acudiendo a la cita. Son los tiempos en que los marinos árabes se lanzan al descubrimiento de las desconocidas tierras del océano Índico, llegan a Madagascar y penetran en el mar de la China. De regreso al hogar, el deseo más acuciante es ir a las tabernas a contar sus andanzas…

La semilla primigenia de esta compleja narración fue la Historia del marinero náufrago escrita en Egipto alrededor del 2200 a. C. durante el Imperio Antiguo. Luego se vio influida con elementos de la Odisea de Homero, una epopeya griega traducida al árabe ya en el siglo VIII d. C. en la corte del califa al-Mahdi, así como con el Romance de Alejandro (una biografía de Alejandro Magno narrada por un pseudo Callístenes y compuesta a fines del siglo III o a comienzos del siglo IV d. C.). A estos elementos (y muchos otros) se sumaron el Libro de los Animales de Al-Jahiz (siglo IX) y las historias orales referidas por navegantes reales del siglo XIII. También fueron quizás fuente de inspiración las siete navegaciones históricas por el océano Índico en el primer tercio del siglo XV que realizó Zheng He, marino musulmán a sueldo de China, conocido asimismo como Ma Sanbao, quien posiblemente dio nombre al personaje.

Y, entretanto, el lector se convierte en asombrado espectador de unas aventuras mágicas y míticas que le permiten vivir la eterna fascinación de lo exótico y de lo desconocido en el mar y en tierras pobladas por inquietantes seres. Por todo ello, Simbad es, por méritos propios, un personaje que forma parte de la memoria colectiva y de la literatura universal.

El autor:René R. Khawam
La autoría de los cuentos de Simbad el Marino es anónima estando fechada en torno al siglo IX, a las puertas de la baja Edad Media. Sin embargo, se puede hablar de quién ha sido el estudioso que más y mejor se ha ocupado de este libro, que es además, su traductor: René R. Khawam.
Nacido en Alepo en 1917 y fallecido en París en 2004. Khawam, sin duda alguna, ha sido uno de los arabistas europeos más prestigiosos de nuestro tiempo. Entre sus trabajos más destacados se incluye, asimismo, una excelsa traducción del Corán, así como de la otra gran obra de referencia en la cultura popular árabe: Las mil y una noches.
En los años sesenta, Khawam se ocupó de estudiar con minuciosidad los textos originales impresos en antiguos manuscritos. Tras un trabajo de años poniendo en práctica las metas de filología para limpiar añadidos posteriores y contextos que procuraban desdibujar los mensajes originales de lo que hoy son considerados obras universales de la literatura, en pos de una corriente orientalista y/o romántica, alejada de la naturaleza primigenia de los pueblos árabes para contentar la imaginación colectiva de Occidente.
Su esfuerzo se vio recompensado a finales de los ochenta, cuando la Editorial Phébus (hoy Libella) publicó en francés la traducción original de Las mil y una noches. En 1996 recibió el Gran Premio Nacional de las Letras por el conjunto de su obra.

El libro:
Las aventuras de Simbad el Marino (en árabe, سندباد البحري Sindibad al-Bahri), ha sido publicado por la Editorial Zenda-Edhasa. Prólogo de Arturo Pérez-Reverte. Ilustración de la cubierta de Augusto Ferrer-Dalmau. Traducción del árabe de René R. Khawam. Traducción del francés de Manuel Serrat Crespo. Encuadernado en rústica sin solapas, tiene 188 páginas.

Como complemento pongo el vídeo de la película El Viaje Fantástico de Simbad.

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Para saber más:
René R. Khawam en Wikipedia.

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«El enigma de las arenas», de Robert Erskine Childers

Prólogo de Arturo Pérez-Reverte
Ilustración de Augusto Ferrer-Dalmau

«…los protagonistas de ‘El enigma de las arenas’ corresponden a aquel otro tipo de héroe tal vez pasado de moda, pero que el lector advertido y audaz sigue reconociendo como necesario, como eterno, como suyo.»   [Del prólogo de Arturo Pérez-Reverte]

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El enigma de las arenas es una novela de Robert Erskine Childers publicada en 1903. El libro, que disfrutó de una inmensa popularidad en los años previos a la Primera Guerra Mundial, es un ejemplo temprano de la novela de espionaje y fue extremadamente influyente en el género de ficción de espionaje.

Cubierta de 'El enigma de las arenas'

Cubierta de: ‘El enigma de las arenas’

El enigma de las arenas le debe mucho a las maravillosas novelas de aventuras de escritores como Rider Haggard, que fueron un elemento básico de la Gran Bretaña victoriana. Era una novela de espías que establecía una fórmula que incluía una gran cantidad de detalles verificables, que daban autenticidad a la historia, la misma estratagema que utilizarían tan bien Ian Fleming John le Carré. Todo el trasfondo físico es completamente auténtico: las diversas islas y pueblos de Frisia mencionados en el libro realmente existen y las descripciones de ellos son precisas (a menudo, de la propia experiencia del autor). También es cierto las diversas «arenas» del título: vastas áreas que se inundan con la marea alta pero se convierten en marismas con el reflujo. Navegar en un bote pequeño en estas condiciones requiere un tipo especializado de habilidad marinera, de la cual el personaje Davies es un maestro insuperable, y las descripciones de sus hazañas son de gran interés para los entusiastas de la navegación —como Pérez-Reverte—, además de su papel en la trama de espionaje del libro.

Aburrido del verano londinense y de la monotonía de su trabajo en el Ministerio de Relaciones Exteriores, Carruthers acepta la invitación de su amigo Arthur H. Davies para participar en un crucero por el Báltico. Pero pronto se da cuenta de que el curioso viaje no va a ser de placer. El Dulcibella resulta no ser un yate, sino un bote destartalado, y conforme navegan por las traicioneras aguas y arenas movedizas, Carruthers se da cuenta de que sus conocimientos de alemán pueden tener una posibilidad insospechada… Es el comienzo de una aventura tan peligrosa como emocionante y plagada de desafíos. Y poco a poco Carruthers se contagia del entusiasmo y la templanza de su amigo, para descubrir en su propio interior nuevas fuerzas y un, hasta entonces desconocido, sentido moral.

El enigma de las arenas ha pasado a la historia de la literatura como la primera muestra de la novela de espionaje. La presentación de la invasión de Gran Bretaña por parte de los alemanes, que más tarde se confirmaría en la Segunda Guerra Mundial, y la advertencia acerca de las carencias de las defensas británicas, hizo que la novela gozara de un rotundo y continuado éxito.

Como curiosidad citaré que en 1998, el escritor náutico Sam Llewellyn escribió una continuación de la historia llamada La sombra en las arenas. Siendo un relato del crucero del yate Gloria en las islas Frisias en abril de 1903 y la conclusión de los eventos descritos por Erskine Childers«.

«Es El enigma de las arenas una formidable historia de mar, amor y guerra […] En lo que a mí se refiere, esos dos jóvenes valerosos que navegan entre brumas hacia el peligro a bordo del Dulcibella son los compañeros de mar y aventura que, en caso de arriesgar así la vida elegiría tener.»
[Del prólogo de Arturo Pérez-Reverte]

Lee y disfruta de un fragmento de la novela.

El autor:Robert Erskine Childers
Robert Erskine Childers de padres anglo-irlandeses, se educó en Cambridge y, entre 1895 y 1910, fue empleado en la Cámara de los Comunes. La navegación fue desde siempre su pasatiempo favorito. Participó como voluntario en la guerra de los bóers, tras lo cual escribió su testimonio, así como también estudios críticos sobre táctica y organización militar. En 1903 publicó su novela El enigma de las arenas, que tuvo gran repercusión y fue aclamada por la crítica. Fue premiado por sus servicios en Inteligencia durante la Gran Guerra. Luego se estableció en Irlanda y se unió al I.R.A. Murió fusilado en 1922.

El libro:
El enigma de las arenas (título original: The Riddle of the Sands, 1903) ha sido publicado por la Editorial ZendaEdhasa. Prólogo de Arturo Pérez-Reverte. Ilustración de Augusto Ferrer-Dalmau. Traducción de Benito Gómez Ibáñez, 1983, revisada en 2022. Encuadernado en rústica, tiene 448 páginas.

Para saber más:
Robert Erskine Childers en Wikipedia.

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