Archivo de la categoría: Ensayo – Crítica literaria

El pensamiento en estado puro

«El gabinete mágico. Libro de las bibliotecas imaginarias», de Emilio Pascual

«Un libro de libros. Un viaje por las bibliotecas de los libros
más importantes de la literatura universal»

.
CUBIERTAConocer a Emilio Pascual es como conocer la historia del libro en nuestro país, pues, luego hablaré de sus principios, es una persona con tinta en las venas y músculos del mejor papel que se pueda encontrar. Licenciado en Filología Hispánica comenzó su andadura literaria en ediciones Paulinas a finales de 1973. A partir de 1980 pasa a la Editorial Anaya, donde ha desarrollado buena parte de su carrera editorial, en las áreas de literatura infantil dirigió la colección ‘Tus Libros’— y de textos clásicos en Ediciones Cátedra. Ha ocupado el cargo de director general de Publicaciones Infantiles y Juveniles de la editorial Anaya y más tarde pasó a desempeñar la dirección de la Ediciones Cátedra.
Su primera novela fue El Purgatorio de don Oficinio (Edival, 1977), que era una sátira sobre la burocracia y sus contradicciones suicidas. Novela primera y primeriza, apuntaba ya sin embargo algunas de las constantes de su autor: el cuidado por el lenguaje y por la prosa, la devoción obsesiva por el Quijote, así como la intertextualidad, la parodia y la cita secreta.
Y esta devoción comenzó en la escuela de su pueblo y la culpa fue de una maestra que después de leer la lección del día les obligaba a escribirla, y en aquella época era con pluma y tintero, tarea agotadora pues debían terminar la página sin borrones. Un día sucedió el milagro y terminó pronto mi tarea. Sin mucha convicción me dijo: «Coge un libro y ponte a leer».

«Empecé por buscar aquel libro maligno de papel amarillento, encuadernado en tela azul. Me senté con respeto. Lo abrí. Ya en las primeras páginas me sorprendieron los alucinados ojos de un hombre sentado a a una mesa, rodeado de volúmenes, oscuridad y silencio, enfrascado en la lectura de un libro interminable. Era la ilustración de Alonso Quijano.»  [Pág. 503]

Me llamó la atención, comenta el autor, los volúmenes que Alonso Quijano tenía en su biblioteca y empecé a ver y coleccionar bibliotecas al hilo de mis lecturas, hasta que a Victoria Fernández le resultó curiosa mi afición y decidió, publicar las primeras en sus ‘Cuadernos de Literatura Infantil y Juvenil’ (CLIJ). Lo demás vino por sus pasos contados, una cuestión de inercia, hasta que llegó el momento de cerrarlas antes de que el Gabinete se desbordara. 
Pero volvamos a esas primeras entregas en la revista, que comenzaron con la biblioteca de Don Quijote a la que siguieron Matilda, Bastián, David Copperfield, Tom Sawyer, el capitán Nemo, Sherlock Holmes, a los que siguieron Baroja, Dostoievski.

20230417_130655
Con el tiempo fui añadiendo bibliotecas a mi colección y aumentada con las aportaciones de mis amigos. Ha habido libros que solo servían de adorno y otros que, como talismanes, acompañaron en vida y muerte a sus dueños; bibliotecas liberadoras, refugio de desdichados, y otras, en manos inclementes, perturbadoras del género humano; ha habido bibliotecarios fanáticos, pero también amparo de pobres y consuelo de afligidos… Hubo libros, hubo bibliotecas, noche primera. Las que parecían dignas de «felice recordación» por su hechizo, su rareza, su simpatía, su capricho o sencillamente su obviedad están en este libro.

Todas vienen a ser imaginarias, aunque los libros no lo sean (o no siempre). Son —podría haberlo escrito en su diario el protagonista de La náusea«como héroes de novela: se han lavado del pecado de existir».

Más de setenta bibliotecas imaginarias que componen un recorrido particular por la historia de la literatura universal. Y como de muestra basta un botón aquí van unas cuantas, son mis favoritas: La biblioteca de la abadía sin nombre (Umberto Eco) – La biblioteca de don Quijote (Miguel de Cervantes) – La biblioteca de Salvo Montalbano (Andrea Camilleri) – La biblioteca privada de Sherlock Holmes (Arthur Conan Doyle) – La biblioteca del Maniobrador de Grúas (Manuel Rivas) – La biblioteca de Bastián (Michael Ende) – La biblioteca de Manuel (Antonio Muñoz Molina) – La biblioteca del coronel Bantry (Agatha Christie) – La biblioteca de don Avelino (Pío Baroja) – La biblioteca de Mr. Shandy (Lauernce Sterne) – La biblioteca de Nino Pérez Ríos (Almudena Grandes) – La biblioteca del cementerio de los libros olvidados (Carlos Ruíz Zafón) – La biblioteca de Babel (Jorge Luis Borges)…

En la Coda final Emilio Pascual escribe: «Mi intención primera fue hacer una Enciclopedia de las bibliotecas con el mismo rigor y exactitud que la de los muertos», y como el propio autor reconoce es una hipérbole resignada. Por cierto, la Coda es la guinda del pastel.

Lee y disfruta de las primeras páginas del libro.

El autor:20230417_130330
Emilio Pascual (Tejares, Segovia, 1948) estudió Filología Hispánica en la Complutense de Madrid. Su vocación de profesor se vio permanentemente pospuesta por las aventuras editoriales en Anaya y en Cátedra. En 1999 obtuvo el Premio Lazarillo por Días de Reyes Magos, que se vio corroborado al año siguiente con el Nacional de Literatura Infantil y Juvenil. Una docena de libros, entre los que cabría recordar El fantasma anidó bajo el aleroApócrifos del Libro y El número de la Bella, han dejado testimonio de su fervor por la lectura.

El libro:
El gabinete mágico. Libro de las bibliotecas imaginarias ha sido publicado por Ediciones Siruela en su Colección El Ojo del Tiempo,  141. Encuadernado en rústica con solapas, tiene 566 páginas.

Como complemento pongo un vídeo en el que Emilio Pascual nos habla de su libro El gabinete mágico. Libro de las bibliotecas.

.
Para saber más:
Emilio Pascual en Wikipedia.

Deja un comentario

Archivado bajo Ensayo - Crítica literaria, Literatura, Literatura, Narrativa

«La historia de la mujer en 100 objetos», de Espido Freire con ilustraciones de @miss_littlebig

«La herencia de las mujeres resulta tan rica, tan diversa y aún hoy día tan desconocida que desborda la manera convencional de contarla. Al igual que las mujeres han encontrado huecos para sobrevivir o imponerse, para escribir o pintar, para llegar a la educación o al poder, para que el dolor disminuyera o el trabajo resultara más liviano, es preciso que la historia que las estudia recurra a miradas y a formatos nuevos.»

CUBIERTA La historia de la mujer en 100 objetosEse es el espíritu que anima este libro, Espido Freire nos acerca a la historia femenina desde una perspectiva distinta, guiados por 100 objetos que tuvieron a las mujeres como protagonistas, destinatarias o inventoras. Desde el pintalabios, la Barbie, el búcaro de barro, la mantilla o la vacuna de la viruela.
Espido Freire nos muestra la astucia de nuestras antepasadas para dar respuesta a sus necesidades en una sociedad que las consideraba una prioridad menor, y rescata un universo condenado al silencio por los historiadores tradicionales.
Pero dejemos que la propia autora nos cuente.

Como toda mi generación, yo estudié historia como una sucesión de hechos ordenados de manera cronológica, con etapas oscuras y menos relevantes, dadas de manera superficial frente a otras que acaparaban gran parte de la atención. El temario repartía las épocas históricas en diversos cursos, y eso provocaba que algunos siglos se estudiaran hasta el aburrimiento, mientras que la historia contemporánea se interrumpía, de manera misteriosa e irrevocable, tras la Primera Guerra Mundial.
En esa narración, las mujeres, que yo buscaba de manera incansable, emergían en escasas ocasiones; cuatro o cinco reinas, con un enfoque más moderno, liberado de los estereotipos que arrastraban desde siglos atrás, y alguna escritora o inventora, siempre las mismas. El punto de vista eurocéntrico resultaba incuestionable. Solo en los últimos años se hacía hincapié en las dinámicas de la propia historia, en las relaciones de causa-efecto. Muchos de los estudiantes que abandonaron los estudios de historia en la adolescencia la recuerdan como una asignatura monótona que premiaba la memorización de fechas, nombres, lugares y conclusiones, una materia que no entendían porque nada había que comprender. La historia, con su peso pétreo, se imponía a sí misma.

A mí, en cambio, me apasionaba la historia desde niña, los qués y los porqués del pasado; mi intuición me decía que no se encontraba tan cerrada ni era tan inamovible como estudiábamos. Aprovechaba los huecos que nuestra formación dejaba para encontrarme con la ficción, y de las novelas o películas regresaba de nuevo a los hechos. Encontré, con los años, que me interesaba mucho más la historia cotidiana que la institucional, y que las mujeres, al igual que las minorías, se encontraban en unos márgenes cada vez más anchos, más evidentes, que debían incorporarse de una u otra manera.
La herencia histórica de las mujeres resulta tan rica, tan diversa y aún hoy día tan desconocida que rebosa la manera convencional de contarla: yo misma la he abordado con biografías, libros de viajes, álbumes ilustrados, conferencias, programas de radio o artículos. Al igual que las mujeres han encontrado huecos para sobrevivir o imponerse, para escribir o pintar, para llegar a los estudios o al poder, para que el dolor disminuyera o el trabajo resultara más liviano, es preciso que la historia que las estudia recurra a miradas y a formatos nuevos, y que sea tan flexible como ellas lo fueron.

Foto 3

En 2010 la BBC y el Museo Británico lanzaron un programa radiofónico revolucionario, una apuesta nueva por la divulgación dela historia: en un programa diario de unos quince minutos Neil MacGregor, director del museo, abordaba la importancia de un objeto de cualquier época y explicaba la relevancia que había tenido en la historia. Esa History of the World in 100 Objects no solo gozó de un éxito sin precedentes, sino que dio origen a un libro1 y a una exposición, para desembocar en un recurso educativo permanente a través de la web teachinghistory100.org
El modelo resultaba tan sencillo, tan versátil y aceptaba tantas adaptaciones que rápidamente se convirtió en una metodología de estudio y, sobre todo, en una manera de que la mirada del experto y del público reparara en momentos y en costumbres que hasta entonces no formaban parte de la historia oficial, de la Historia con mayúsculas. La historia de los objetos se ha convertido desde entonces en una forma de estudio más concreta y palpable, y accesible a quienes poseen conocimientos históricos muy superficiales.

Ese es el espíritu que anima este libro: el que, por un momento, por cien momentos, descubramos, a través de los objetos que nos guían, datos, circunstancias y hechos que no conocíamos, que tuvieron a las mujeres como protagonistas o como destinatarias, y que nos permitirán acercarnos a la historia femenina desde una perspectiva distinta.

Lee y disfruta de un fragmento del libro.

La autora:OLYMPUS DIGITAL CAMERA
Espido Freire nació en Bilbao en 1974. Debutaría como escritora con Irlanda (1998). Año y medio más tarde consiguió el Premio Planeta por su obra Melocotones helados (1999). Ha publicado otras siete novelas, entre ellas Llamadme Alejandra, Premio Azorín 2017, varios libros de cuentos (entre ellos El tiempo huye, Premio NH 2001) y destaca por su producción ensayística: sus temas oscilan entre el análisis social (Primer amor, Mileuristas, Los malos del cuento), la literatura (Para vos nací, Tras los pasos de Jane Austen) y los viajes (Querida Jane, querida Charlotte, Hijos del fin del mundo, Premio de Libro de Viajes de Llanes 2009). Otros tres ensayos (Cuando comer es un infierno, Quería volar y La vida frente al espejo) tratan el tema del cuerpo femenino y los conflictos entre emoción y enfermedad.
Además de otros géneros (poemas, libro ilustrado, teatro…) ha publicado cuatro novelas juveniles. Colabora y ha colaborado con los principales medios de prensa nacionales: La Ser, Radio Euskadi, Radio Clásica, Antena 3… En la actualidad publica en 20m, Viajar y Vida Nueva, además de en la plataforma literaria Zenda. También ha trabajado como traductora literaria.
Es directora del Máster de Creación Literaria de la Universidad Internacional de Valencia, VIU y del Máster de Creación Literaria y otras Narrativas en The Core (Madrid). La crítica la ha saludado como a una de las voces más interesantes de la narrativa española, y las alabanzas que surgieron con su primera obra han acompañado sus siguientes novelas. Ha sido traducida a más de una docena de idiomas.

El libro:
La historia de la mujer en 100 objetos ha sido publicado por la Editorial La Esfera de Los Libros fuera de colección. Encuadernado en cartoné, tiene 440 páginas.

Como complemento pongo un vídeo realizado por la editorial de La historia de la mujer en 100 objetos.

.
Para saber más:
https://espidofreire.com/
https://www.instagram.com/espidofreire/

Deja un comentario

Archivado bajo Arte, Biografías, Ensayo - Crítica literaria, Historia, Literatura, Literatura, Narrativa